Villa Educación

Jueves 21 de noviembre de 2024

¿POR QUÉ LOS CIENTÍFICOS EXPERIMENTAN CON RATAS Y RATONES?

(Agencia Informativa Conacyt). En investigación básica, principalmente en la orientada a la salud, se requiere de modelos animales, criados en su mayoría en bioterios ex profeso, y que resultan esenciales en la etapa de experimentación.

Pero ¿por qué es necesario hacer uso de este tipo de animales en proyectos de investigación y por qué son las ratas el modelo más utilizado? De acuerdo con la doctora María Alicia Sánchez Mendoza, investigadora en ciencias médicas del Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez, se recurre a modelos animales debido a que en la actualidad son la mejor opción para reproducir las condiciones fisiológicas y patológicas que puede desarrollar un organismo complejo.

“Para poder tener todas las características propias de una enfermedad desarrollada por un ser vivo, no hemos sido capaces de generar otras opciones que funcionen mejor que un sujeto vivo”.

¿Por qué ratas y ratones?

La doctora, que también es miembro nivel II del Sistema Nacional de Investigadores (SNI), dijo que aun cuando se experimenta con diversos modelos animales, que van desde las ratas y cerdos hasta los primates, los roedores son la mejor opción por varios factores, como el tamaño, su ciclo de vida y algunas similitudes fisiológicas con los humanos.

“El tamaño es importante, entre otras cosas, porque la cantidad de fármaco que se emplee para aliviar una enfermedad o producir una situación patológica es realmente mínima en comparación con otras especies cuyo tamaño es mayor. Debemos considerar que en investigación, un solo miligramo de ciertas sustancias puede costar arriba de los 80 mil pesos y ello hace que resulte demasiado costoso probar o desechar una sola hipótesis que se tenga”.

En términos de la fisiología del animal, la investigadora precisó que gracias a que la mayoría de sus órganos son similares a los de los humanos, tienen la capacidad de reproducir las mismas patologías y, en consecuencia, muchas de las respuestas terapéuticas con fármacos que resulten efectivos en los roedores podrían replicarse en los humanos.

“Además, unificar las especies utilizadas en actividades experimentales permite que los trabajos realizados por otros grupos a nivel nacional e internacional sean utilizados como referencia. Eso hace posible realizar una estandarización de las observaciones, lo cual a su vez implica un mejor traslado de esos conocimientos a la etapa clínica”.